25 de octubre de 2012

Twelve pints, Twelve Pubs. Salir de fiesta por Dublin.




Para quien quiera hacerse una idea de lo que son los Pubs, salas de conciertos y en definitiva, la juerga que hay en Dublín, os adjunto un mapa que hicieron unos amigos por motivo de la despedida de otro, (tan común por cierto entre la gente que vivimos aquí).
En esta ruta encontrareis desde míticos pubs hasta salas de conciertos. A cada cual mejor.

Comenzaron a las 2 e la tarde en uno de los más archiconocidos Pubs de Dublín, “The Celt” y terminaron cuando cerro la última sala de conciertos a eso de las 3.00 AM, la gran conocida “Mezz”, pasando por otra de las zonas con más ambiente y buenos garitos de la ciudad como es la zona de “Candem”.
(Nota: la lista esta desordenada cronológicamente.)

Yo añadiría a esta lista algún que otro Pub de los que tanto me gustan, aunque no para seguir en esta ruta, ya que os podéis imaginar cómo se puede terminar.
Hay muchísimos en la ciudad pero yo os dejo los que más se podrían ceñir a esta lista.

Ahí os dejo mis recomendados:
Cassidy’s, The Cobblestone, Turk’s Head, Sweeney’s, Hogan’s, Stag’s Head, T.P. Smiths, O’Neil’s, The Brazen Head, …
Como veréis, hay donde elegir.

Os dejo el enlace para acceder al mapa.


Conocéis algún que otro Pub o sala que se pueda añadir a la lista?

Foto: Google Map

17 de octubre de 2012

Costa oeste de Irlanda (II). Connemara National Park




Al día siguiente (Domingo) y después de haber desayunado y charlado con los simpáticos dueños del B&B, enfilamos hacia Connemara. No sin antes dar un paseo por la ciudad de Galway y de paso comprar algo de comida para el camino.
Se trata de una carretera que hace un circuito en el que podremos ver todos los pueblos y paisajes que existen dentro del mismo.
No se tarda más de hora u hora y media en ver los auténticos paisajes irlandeses desde que entramos en Connemara. Grandes espacios inhabitados tan solo salpicados con alguna que otra granja perdida y, eso sí, ovejas por todas partes. Un poco más adelante empezaréis a ver montañas y lagos junto con pequeños ríos, y multitud de lugares de donde extraen la turba, …y más ovejas.
Por falta de tiempo no pudimos hacerlo, pero subir a cualquiera de estas montañas y ver las vistas que de allí se pueden tener debe ser impresionante.
Dentro del National Park os encontraréis la abadía de Kylemore tantas veces vista en postales. No entramos ya que cobran como unos 12€, pero esto sólo fue algo más dentro de todo un recorrido de paisajes y pequeños pueblecitos dignos de descubrir.



















Por último, de camino de vuelta, tendréis que tirar dirección Galway para poder coger la autopista que os dejara de nuevo en Dublín.


Más información:
http://es.wikipedia.org/wiki/Parque_nacional_de_Connemara




Fotos: Julen Esnal
Fuente: Wikipedia


16 de octubre de 2012

Costa oeste de Irlanda (I). Cliffs of Moher.




Después de tiempo viviendo en Irlanda, por fin decidimos conocer con mayor profundidad el condado de Galway, al oeste de Irlanda.
Y no me refiero tan solo a la ciudad, que como siempre digo, es quizá de los lugares menos importante de ver en este país, sino a los famosos Cliffs of Moher y el Connemara National Park. Vamos, naturaleza en estado puro.

Para poder ver todo lo que nos proponíamos visitar en tan solo un par de días, el viaje nos lo montamos de la siguiente manera:

Salida desde Dublín el sábado hacia las 12 del mediodía. 
No os llevara mucho más de 2 horas llegar hasta Galway ya que es todo autopista.
En total, 9.20€ en peajes (ida y vuelta incluida). 
A nuestra llegada, decidimos ir directamente al B&B que previamente habíamos reservado para poder tener el resto del día libre. De paso nos sirvió para que el amable dueño nos diera unos cuantos consejos y unos mapas antes de seguir la ruta. (“B&B Corrigeen”. www.corrigeen.com)

Castillo de Dunguaire, Kinvara Bay, Galway.

Llegaríamos a los Cliffs como hacia las 6 de tarde, (perfecta hora para no juntarse con multitud de turistas, familias y demás), ya que hay como una hora y media de trayecto desde Galway.
Para nuestra sorpresa tuvimos que pagar 6€ por cabeza, para algo que, a nuestro entender, debería ser gratis ya que es pura creación de la naturaleza. Ah sí, incluye la entrada al museo… 
Al igual que muchos lugares de Irlanda, (y del mundo, obviamente) es algo que debéis de ver por vosotros mismos; La sensación que se tiene ante algo tan grande y bello, jamás se puede sentir por muchas fotos que se  hayan visto. Especialmente cuando uno salta las barreras de protección, y lo veis en su versión más pura. Eso sí, bajo vuestra cuanta y riesgo, que no es poco, debido a los fuertes golpes de viento, que a más de uno le ha hecho precipitarse al vacío desgraciadamente.
Si a esto se le añade la suerte de tener un día despejado, podréis ver la caída del sol hacia el mar y las diferentes tonalidades que van tomando los acantilados. Es sencillamente espectacular.


Tamaño de las personas con respecto al acantilado.









La suerte nos siguió acompañando cuando, a la salida de los Cliffs (hacia las 9 de la noche) y 
con ganas de una buena cena, dimos con un sitio que servían comidas hasta tarde con música 
irlandesa en directo.
No recuerdo el pueblo, pero sé que nos llevó un buen rato encontrarlo ya que no es fácil encontrar un sitio donde sirvan comidas a esas horas.


Mas informacion:



Fotos: Julen Esnal
Fuente: Wikipedia